El día de ayer los desfiles de Haute Couture comenzaron a las 10 de la mañana con una pasarela de Maison Margiela. La colección de John Galliano desbordó creatividad, creando piezas con muchas capas, el diseñador tuvo como propósito simbolizar las dificultades de la humanidad y las “capas” que tiene que pasar para llegar a lo emocional o sensible.
Durante el desfile hubo fotografías de los años 60 que evocaban al pasado de la cultura americana y hacían referencia a los existentes alrededor del mundo. Todo esto con el propósito de descubrir el significado entre la unión y similitud entre el pasado y el presente, a través de prendas como sombreros altos, bordados de lana y faldas espectaculares que escondían caras.
Después de horas de un emocionante desfile de esta firma, nos transportamos a un mundo de colores terrosos con Franck Sorbier que además de presentar vestidos con estampados naturistas y capas que nos recuerdan a la textura del papel de estraza con destellos dorados, vimos vestidos para niñas repletos de detalles como cuentas, encajes y muchos olanes.
Llegó el turno de Elie Saab la firma libanesa que una vez más cautivó con sus vestidos de noche llenos de transparencias, flores y bordados; utilizando colores pastel y neutros siendo el azul rey el más vivo.
Cambiamos de aire romántico para pasar a un estilo mucho mas sombrío con Jean Paul Gaultier. Trajes sastre, vestidos, sombreros, prints de rayas y flores hawaianas. Haciendo uso de una paleta de colores totalmente radicales como el negro sobrepuesto con un rojo cereza. ¿Nuestro favorito? El cierre del desfile con su versión de vestido de novia modelado por la canadiense Coco Rocha.
Alrededor de las 4 de la tarde era turno de la innovadora marca Viktor & Rolf que presentó diseños atiborrados de tul con telas sobre puestas, estampados y transparencias. Lograron transportarnos a un romántico cuento de hadas.
Volvemos al medio oriente con los diseños de Zuhair Murad y nos brincamos hasta Italia con Valentino. El diseñador Pierpaolo Piccioli diseñó una colección sencilla y delicada para este marca. Vestidos de gasa, volantes y escotes, en colores como rosa pastel, menta y verde arcilla, con detalles de flores y lentejuelas evocaron un mundo totalmente mágico.
Quedando dos desfiles para concluir este día, cambiamos de panorama para llegar a un ambiente de “cabaret nocturno” con Ulyana Sergeenko y sus corsets y vestidos de satín iluminados con luces rojas.
Para cerrar Guo Pei presentó una colección en “La Conciergerie” el lugar donde María Antonieta estuvo presa antes de ser guillotinada, siendo esta una locación perfecta para complementar las creaciones del pekinés que parecía que hubieran sido sacadas del Versalles del siglo XVIII.
Estate atento a la cobertura de todas las pasarelas en nuestra página.
Por Patricia Velasco -