Los diseñadores Alexander Wang, Nicolas Ghesquiere, Dires Van Noten y Alver Elbaz, entre otras 11 figuras de la industria, han salido en defensa de Apple en el litigio que mantiene con Samsung, a quien acusa de plagio.
La compañía de la manzana está inmersa de una larga batalla legal en contra la empresa coreana desde que, en 2012, le acusaría de copiar tres elementos del diseño de su iPhone: la pantalla frontal, las esquinas redondeadas y su interfaz de iconos en forma de mosaico.
Los diseñadores han firmado un acuerdo al que han llamado amicus brief, un documento legal presentado por personalidades y marcas que, en realidad, no están directamente implicadas de ninguna manera en el litigio entre Apple y Samsung. Entonces, ¿Cuál es el interés de la industria en el asunto? Si Samsung quedara impune de la disputa, podría sentar un precedente sobre propiedades intelectuales, facilitando que se violen patentes también en la moda.
“Los que han firmado el documento tiene una gran preocupación por lo que está pasando con Samsung. Ellos también dependen del diseño como éxito de su trabajo”, ha afirmado el diseñador Charles Mauro, fundador de Mauro New Media y representante del grupo, al portal Business of Fashion. Este gesto no solo subraya la importancia de proteger la propiedad intelectual, sino que también pone en valor el reconocimiento visual y la asociación de un producto a una marca.
Hasta el momento, Samsung ha sido condenado a pagar 548 millones de dólares. Eso sí, la compañía de Steve Jobs exigía inicialmente un billón. El próximo 11 de Octubre ambas empresas se verán las caras en un juzgado. En caso de que Apple no tuviera éxito, serían condenados a devolver parte de la suma recibida.