Acapulco casa de uno de los muebles más característicos de los años de oro del puerto y, sin duda, un elemento de diseño característico de México: la Silla Acapulco
Creada anónimente en la costa mexicana del pacifico y producida por la empresa oficial de Don José Cortés desde hace más de 35 años, la clásica silla surgió junto al conocido acantilado de Acapulco “La Quebrada” con un diseño en forma radial y una particular curvatura que reproduce los antiguos tejidos mayas, permitiendo un efecto permeable y refrescante. Conocida como una de las sillas clásicas de los interiores y terrazas de Acapulco, la Silla Acapulco continúa su tradición e historia con nuevas técnicas, apoyando a artesanos mexicanos que han hecho de la silla todo un icono.
Nacido en Acapulco Guerreo, Don José Cortés produjo la silla a partir de un armazón metálico con acabado electrostático mate, y asientos de colores pastel a partir de un particular tejido de tradición maya, reemplazando los hilos naturales con cordones de PVC, facilitando un diseño ergonómico y un clásico reflejo de la vida en el puerto de Acapulco.