Cristeros suma a su catálogo su cubrebocas en colaboración con Carla Fernandez.
La moda como la conocíamos ya no es la misma. Las marcas más importantes de ropa y accesorios supieron ver una oportunidad creativa en esta nueva normalidad pandémica. Parece que las tendencias enfocadas en la salud van en alza y no podemos quedarnos atrás si es que queremos que nuestro cubrebocas haga match con el resto de nuestro outfit. Como suele decirse, las opciones se vuelven infinitas.
Hoy nos levantamos con la noticia de que Cristeros se sumó a esta nueva afición de producir cubrebocas que vayan con nuestro estilo de vida, inspirados en el estilo Grunge tan urbano que nos encanta. Esta propuesta es ideal para aquellos que disfrutan los colores opacos y neutros, además de que te cuidan y dan un estilo único.
La colaboración no pudo tener una mejor aliada que Carla Fernández, una de las diseñadoras más reconocidas en México, quien además de poner el nombre de nuestro país en alto por sus grandes diseños, tiene la preocupación por preservar y revitalizar el legado textil de las comunidades indígenas. Las fotografías hablan por sí mismas, este nuevo diseño es algo que de verdad nos vemos portando todos los días (y noches).

Esta propuesta cuenta con dos diseños inspirados en la Cultura Grunge; con una cruz en medio y el uso del color negro, sin lugar a duda marcan el distintivo que caracterizan este gran movimiento de principios de los 90’s. Los cubrebocas están compuestos de una capa de popelina de algodón, un diseño en estampado digital e impresión con tintas Eco Passport; la cual es una nueva metodología de impresión sustentable en la producción textil.

Con esta creación se apoyaron a 175 artesanos en toda la República Mexicana y a 59 familias que dependen directamente de la marca Carla Fernández, por lo que, además del elegante diseño, consideramos que esta es otra de las grandes razones por las que cada mexicano debería contar con uno de estos cubrebocas en su guardaropa.
Como uno de los mensajes principales acerca de esta colaboración se hace hincapié en que el bienestar y la moda no están peleados, al contrario, pueden ir de la mano sin limitarse una a la otra. La moda es mutable y adaptable, por lo que no podemos esperar para ver qué más sucederá en el futuro de los accesorios como los que hace Cristeros.