No es sorpresa que desde ya hace unos meses el tema del COVID-19 es uno de los estelares por donde quiera que volteemos. La moda y la música son unas de las principales industrias que ha tomado el toro por los cuernos, en todos los sentidos, para darle la vuelta a esta crisis.
Hace unos días el artista británico Banksy dio a conocer a través de su cuenta de Instagram la travesía para realizar su nueva obra en el metro de Londres. Enfundado en un traje de protección, el artista británico se coló al metro de Londres para plasmar una pieza con un mensaje contundente sobre el uso del cubrebocas en época del coronavirus.

«Si no llevas mascarilla, no subes», fue el main message de la pieza que el artista hizo ante la mirada de varios pasajeros que no comprendían lo que estaba pasando. Las ratas, los cubrebocas y los fluidos de la obra buscaban mantener el mensaje de conciencia y la importancia de la prevención para frenar los contagios del coronavirus en la capital británica, donde desde hace un mes el uso de cubrebocas es obligatorio.
La nota del día la dio Daily Mail al declarar que la obra fue borrada por un empleado de limpieza del metro quien dijo que se trataba de un acto más de vandalismo. Transport of London, organismo encargado del metro londinense, se limitó a publicar el siguiente mensaje: «Apreciamos el sentimiento de alentar a las personas a usar mascarillas, lo que está haciendo la gran mayoría de los clientes en nuestra red. Nos gustaría ofrecer a Banksy la oportunidad de hacer una nueva versión de su mensaje para nuestros clientes en una ubicación adecuada».
Como dato curioso, se dice que esta obra pudo haber sido una de las más caras del artista debido a su tamaño, localización y la temporalidad en la que se realizó. Se estima que pudo haber tenido un valor estimado de 82 millones de euros. ¡Oh mi dios!